Casi todo el arco político del país europeo se unió para aprobar la moción que obliga al Gobierno a oponerse al pacto en el Consejo Europeo, donde es necesaria la unanimidad para su aprobación. Las principales causas esgrimidas son el cuidado del medio ambiente y la protección de los agricultores locales
El Parlamento de Austria aprobó el miércoles una moción que obliga al Gobierno a vetar ante el Consejo Europeo la aprobación del tratado comercial entre la Unión Europea (UE) y Mercosur, lo que ha puesto en serias dudas el futuro del pacto.
La propuesta tuvo el apoyo de todos los partidos parlamentarios (socialdemócratas, democristianos, ultranacionalistas e izquierdistas), con la excepción del liberal NEOS, que apoya el acuerdo, aunque reclama algunas modificaciones.
En los últimos días el acuerdo ha sido muy criticado en Europa debido a los incendios forestales en el Amazonas, especialmente en Brasil, que han generado dudas sobre los compromisos de algunos países del bloque sudamericano con el cuidado del medio ambiente. En los últimos días el acuerdo ha sido muy criticado en Europa debido a los incendios forestales en el Amazonas, especialmente en Brasil, que han generado dudas sobre los compromisos de algunos países del bloque sudamericano con el cuidado del medio ambiente.
También, desde el principio los agricultores europeos, sobre todo en Francia e Irlanda, se manifestaron en contra del pacto, ya que consideran que no podrán competir en igualdad de condiciones con los productores sudamericanos.
El partido conservador OVP, actualmente el de mayor peso en el Parlamento, apoyó inesperadamente la propuesta, mientras que el ultranacionalista FPO aseguró que el acuerdo “es historia” y que Austria no puede arrodillarse ante los intereses de la industria. También Los Verdes, que no están en el Parlamento, defendieron la necesidad de detener el acuerdo que calificaron de “nocivo”.
Austria celebrará el 29 de septiembre elecciones generales anticipadas, de las que saldrá un nuevo Parlamento y un nuevo Ejecutivo, que sustituirá al actual gabinete de expertos, en el poder desde junio tras una crisis política que acabó con la coalición entre conservadores y ultranacionalistas.
El nuevo Gobierno estará obligado a aplicar este veto en el Consejo Europeo, donde están representados todos los países de la Unión Europea y que debe ratificar el acuerdo, junto con el Parlamento Europeo y los Estados miembros.
Fuente: (Con información de EFE y Reuters)